Robson de Jesús Gomes (Río de Janeiro)
Cargo: Comercial de Albacete y Madrid
Su rutina, basada en entrenar, viajar, jugar partidos y descansar. El fútbol sala era la pasión de Robson Gomes, que ya desde pequeño tenía un balón en los pies. Fue a los 19 años cuando convirtió esa pasión en su trabajo, dedicándose profesionalmente. Su carrera en Brasil no le impidió probar suerte en el extranjero, precisamente en España, donde vistió los colores del Córdoba y el Ourense. Finalmente, se quedó en el Club Albacete Futbol Sala, donde conocería al fundador de VIATOR, Juan Morales.
El deporte, pues, fue la vía con la que Robson empezó la relación con su actual empresa. No podía ser de otra manera, ya que VIATOR vestía al primer equipo del club. Lo que durante años fue una colaboración informal, dando a conocer la marca por Albacete y su entorno, acabó siendo su empleo definitivo a finales de 2004.
Robson cubrió una necesidad que con el tiempo se ha hecho vital en la empresa: conocer, tratar y, sobre todo, cuidar a los clientes. “VIATOR tiene la consigna de cuidar todos los detalles y responder rápidamente cualquier mensaje de los clientes. La atención tiene que ser máxima, sea cual sea el cliente y el tipo de pedido. Sin duda, es uno de los motivos por los cuales tantos clubs siguen con nosotros” afirma el protagonista.
Con el Albacete Balompié luciendo ropa VIATOR por todos los campos de Primera División, era imprescindible controlar no solo la ciudad sino toda Castilla-La Mancha. Robson se convirtió en el comercial de Albacete (y en su defecto, de la comunidad autónoma) y, más tarde, también de Madrid.
Así como un experto en marketing, en comunicación o en contabilidad, el comercial también se ha convertido en una figura imprescindible para toda gran empresa. Su trabajo va más allá de conseguir clientes, ya sean actuales o potenciales, y se encarga de gestionar todo lo relativo al pedido. “Al final, no solo es conseguir que la venta salga bien y punto, sino que el cliente quiera repetir. Las ventas no llegarán si el cliente no está satisfecho”.
Uno de los valores de VIATOR es la proximidad y el espíritu local, que Robson ha podido comprobar de primera mano. “Debido a mi experiencia en el Albacete Futbol Sala, hace años que conozco la dirección de VIATOR y, sinceramente, siempre me lo han puesto muy fácil. Hay un vínculo muy estrecho entre la empresa y sus trabajadores”.
Sin duda, el target de la empresa y sus productos han sido un aliciente para Robson. “Yo llevaba toda mi vida dedicada profesionalmente al futbol y trabajar con VIATOR es una manera diferente de seguir ligado al deporte”.
“VIATOR viste el deporte. Se preocupa por los clubes y, sobre todo, por las personas que están detrás” concluye.